Cuevas de Ajuy, el diario geológico del planeta Tierra.

Fuerteventura es conocida por sus playas de arena blanca y clima cálido, pero también ofrece rincones escondidos que son historia fosilizada de nuestro planeta.

Con una antigüedad de unos 17 millones de años, en Fuerteventura existe un lugar en donde puedes observar rocas de más de 100  millones de años y no, no te salen las cuentas. 

¿Cómo es posible que una isla que no llega a los 20 millones de años de edad tenga en la superficie piedras mucho más antiguas?

Pues por una serie de catastróficas desdichas y, tras muchos años de vulcanismo activo formando grandes edificios de sedimentos, estos colapsaron y todo el material se desplazó hacia el mar, dejando al descubierto el Complejo Basal con más de 100 millones de años. 

O lo que es lo mismo: se quedaron a la vista las tripas de la Tierra. 

¿Y dónde puedes ver estas “tripas”?

Pues ya que he despertado tu curiosidad geológica, vamos a poner en práctica tus habilidades, cuál Indiana Jones “en busca del diario perdido del planeta Tierra”.

Introducimos las coordenadas y nos dirigimos hacia las Cuevas de Ajuy, en Fuerteventura.

¿Dónde están las Cuevas de Ajuy?

En la costa oeste de esta isla canaria encontramos un pequeño poblado marinero con unas decenas de casas, un par de restaurantes, pocas calles y una pequeña playa de arena negra. 

Para llegar hasta aquí, es tan fácil como localizar el pueblo de Ajuy en el GPS y, una vez llegues, comiences tu aventura.

Mirando hacia el mar, a la derecha de la playa podrás ver el comienzo de un sendero que te conducirá bordeando la costa hasta las famosas cuevas que toman el nombre de esta localidad majorera. 

Recorrer el camino no te llevará más de 10 minutos, pero recomendamos que te detengas a admirar todo lo que tienen por ofrecerte. 

Si sabes leer entre líneas, verás que no todo lo que te rodea es simple polvo y piedras. 

Presta atención, porque vamos a descubrir muchos secretos. 

¿Qué ver en las Cuevas de Ajuy?

El sendero que conduce hacia las cuevas comienza con una ligera pendiente de subida y es de tierra. Así que no olvides un calzado cómodo para la caminata que estás a punto de comenzar. 

Cuando termines de ascender, párate a contemplar la panorámica de arena negra que ofrece la playa desde este punto. Ahora observa tus pies, dónde estás parado. 

Este pequeño acantilado es mucho más de lo que crees. Lo primero que llama la atención es el color, extrañamente claro para estar tan cerca de una playa de arena negra. Mira un poco más de cerca, parece roca, pero no lo es. 

Ahora fíjate bien. ¿Ves conchas de pequeños moluscos incrustados en la pared?

Si tu respuesta es afirmativa, voy a desvelarte el misterio. 

Te encuentras sobre las dunas fósiles más antiguas de Canarias, y todos los fósiles marinos que has encontrado dan fe de su procedencia. 

Sigue el camino y encontrarás unos viejos hornos de cal y un pequeño muellito que se usaba para transportar la cal desde aquí hacia otras islas, como Gran Canaria o Tenerife. Esta industria fue muy fructífera en la isla durante siglos y alivió la economía majorera hasta entrados en el s. XX.

Ya estamos a punto de llegar a nuestro destino. 

En la siguiente curva se presentan ante ti las Cuevas de Ajuy. 

Su impresionante tamaño no deja indiferente a nadie. Continúa el camino y baja las escaleras al final. Si la marea está baja, podrás entrar en la primera cueva y admirar las rocas más antiguas de Canarias. 

Se estima que tienen alrededor de unos 120 millones de años y pertenecen al Complejo Basal. Es decir, son las primeras coladas de lava que surgieron en la superficie oceánica y, que en teoría deberían estar ahí abajo, en lo más profundo del océano Atlántico. 

Pero hace unos 15 millones de años se produjo un colapso de los edificios volcánicos que había en la isla (embrión de lo que es la actual Fuerteventura) y estos se derrumbaron hacia el mar, dejando al descubierto las primeras rocas que surgieron de la profundidad del mar. 

Para que te hagas una idea de la magnitud de este evento, se estima que los edificios volcánicos que se derrumbaron tenían la altura del Pico del Teide (3715 m) y la elevación máxima de Fuerteventura actualmente es de 807 m. 

Aprovecha esta oportunidad única de acercarte a ver y tocar las entrañas de la tierra. 

No es de extrañar que, debido a su naturaleza geológica, las cuevas formen parte del Monumento Natural de Ajuy. 

Como curiosidad, hace años se empezaron a excavar unos túneles en las cuevas para unir unas canteras cercanas con el Puerto de la Peña y así facilitar el transporte de la cal y otros minerales hacia el resto de islas. 

Pero como el proyecto quedó inacabado, los trabajadores de la cal utilizaban estos túneles para pasar la noche, al igual que lo marineros que se acercaban a la costa. 

Otro dato interesante es que los conquistadores castellanos entraron a Fuerteventura por esta zona de la isla, siendo recibidos por la parte más antigua de la misma, sin ellos tener ni la más remota idea de lo que pisaban. 

Lo que a priori parece una simple excursión por la costa, se convierte en toda una aventura si sabes mirar en la dirección correcta. 

¿Qué hacer en Ajuy?

Una vez que terminas el recorrido y la visita a las cuevas, solo te queda volver al pueblito en donde empezó la ruta. 

Si has llegado por la tarde, te recomendamos que veas el atardecer desde la playa o desde alguno de los restaurantes o cafeterías que hay en la aldea. 

Estás en la costa oeste de Fuerteventura y las vistas del sol poniéndose en el horizonte son espectaculares. 

No desaproveches la ocasión para degustar algún plato típico o pescados frescos de la zona. 

La playa ofrece una zona de fina arena volcánica y otra con algunos callaos, pero toda su costa es bastante fuerte, así que si decides darte un chapuzón, observa cómo está el mar y maximiza las precauciones. 

No te olvides de llevar ropa y calzado cómodo para la ruta, protector solar, una gorra, gafas de sol y un bañador para refrescarte en el Atlántico cuando termines la caminata. 

Recuerda que estás en una zona de Alto Interés Geológico y, por tanto, está protegida. No tires basura y si la ves, recógela y deposítala en los contenedores de residuos que hay en el pueblo. 

 

Este artículo ha sido escrito con todo el amor que sentimos por Fuerteventura. Esperamos que disfrutes tu visita a las Cuevas de Ajuy tanto como hemos disfrutado escribiendo esta sección. 

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